Grupo Editorial Literato busca crear un nuevo estándar editorial para lograr que los libros sean realmente accesibles e inclusivos para personas con discapacidad visual.

Por Áurea González

El acceso a la información y a la lectura es un derecho fundamental. Sin embargo, para millones de personas con discapacidad visual, este derecho ha sido limitado durante mucho tiempo. En un mundo donde la tecnología avanza a pasos agigantados, es imperativo que las editoriales se sumen a la tarea de generar soluciones inclusivas para todos los lectores, independientemente de sus capacidades visuales. 

En este sentido, Grupo Editorial Literato está proponiendo una nueva iniciativa para establecer un estándar en la industria editorial, que vaya más allá del sistema Braille, aprovechando las tecnologías modernas para hacer los libros más accesibles e inclusivos. A través de la codificación avanzada de textos y recursos multimedia, como por ejemplo la tecnología de Gridmark, esta iniciativa permitirá a las personas con discapacidad visual acceder a una gama mucho más amplia de contenidos mediante sistemas de reproducción de voz y escucha.

Accesibilidad más allá del braille

Si bien el Braille ha sido una herramienta indispensable para muchas personas con discapacidad visual, no todos tienen acceso a la formación necesaria para leerlo, y la cantidad de libros disponibles en este formato es limitada. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, aproximadamente el 1% de los libros publicados a nivel mundial está disponible en Braille o formatos accesibles. Esto crea una barrera significativa para millones de personas que desean disfrutar de la lectura o acceder a información escrita.

La propuesta de Grupo Editorial Literato busca cambiar esta realidad. Utilizando tecnologías de codificación de textos y la conversión de texto a voz mediante dispositivos, los libros podrán "leerse" en voz alta para los usuarios, permitiendo una experiencia accesible para aquellos que no pueden interactuar con el texto escrito de manera tradicional. 

La creación de libros accesibles para personas con discapacidad visual va mucho más allá de una simple innovación tecnológica. Se trata de una cuestión de justicia social y derechos humanos. Asegurar que todas las personas tengan acceso al conocimiento y la cultura es fundamental para crear una sociedad más equitativa e inclusiva.

En México, la Sociedad Mexicana de Oftalmología calcula que hay 2 237 000 personas con deficiencia visual y cerca de 416 000 personas con ceguera. Por su parte, en el Censo de Población y Vivienda (inegi, 2020) se establece que la población con discapacidad, según actividad cotidiana, con problemas para ver, aun utilizando lentes, representa 43.5% en el Estado de México, es decir, aproximadamente 1 800 000 personas con problemas visuales o con limitaciones de la vista. La cuales se ven seriamente afectadas en el acceso de materiales para su entretenimiento y desarrollo personal. 

Esta iniciativa no solo promueve la inclusión en el ámbito cultural, sino que también tiene un impacto significativo en la educación. Las personas con discapacidad visual a menudo enfrentan dificultades para acceder a recursos educativos en formatos que les resulten útiles. Al facilitar el acceso a textos codificados y adaptados para la reproducción de audios, se abren nuevas oportunidades para la educación y el desarrollo personal.

Además, se potencia la independencia de las personas con discapacidad visual. Tener la posibilidad de acceder a libros, tanto académicos como recreativos, de manera autónoma y sin necesidad de intermediarios amplía sus horizontes y fomenta su participación activa en la vida cultural y educativa.

Por qué las editoriales deben apostar por la accesibilidad

La accesibilidad no debería verse como una opción, sino como una obligación ética y social. En una industria donde el acceso a los contenidos es esencial, las editoriales tienen la responsabilidad de adaptarse a las necesidades de todos los lectores, incluyendo aquellos con discapacidades visuales. Apostar por la accesibilidad implica garantizar que todos puedan disfrutar de los beneficios de la lectura, independientemente de sus capacidades.

Además, la accesibilidad es buena para el negocio. Al hacer que los libros sean accesibles para un público más amplio, las editoriales no solo cumplen con su responsabilidad social, sino que también se abren a nuevos mercados. Millones de personas con discapacidades visuales en todo el mundo están deseosas de consumir contenido cultural, educativo y de entretenimiento en formatos accesibles.

El futuro de la lectura inclusiva

El compromiso de Grupo Editorial Literato con la accesibilidad marca un importante paso hacia un futuro donde la inclusión sea la norma y no la excepción. Nuestra propuesta es comenzar con los libros de nuestros sellos editoriales de casa, codificando los textos con el apoyo de la tecnología de Gridmark, además de ofrecer estas nuevas tecnologías a instituciones privadas o de asistencia social para que puedan hacer sus materiales realmente inclusivos para todo tipo de lectores.

Al utilizar estos nuevos recursos y tecnologías, que son capaces de adaptarse a todo tipo de contenidos, buscamos sentar un precedente para que otras editoriales sigan el ejemplo. 

El verdadero cambio ocurrirá cuando la accesibilidad se integre en todas las fases del proceso editorial, desde la creación hasta la distribución de los libros. La colaboración con organizaciones civiles y gubernamentales que promueven los derechos de las personas con discapacidad, el sector tecnológico, así como el apoyo de los medios de comunicación y la misma sociedad, será clave para dar difusión y hacer que la accesibilidad sea una realidad.

La creación de un estándar editorial que priorice la accesibilidad para personas con discapacidad visual no solo es una cuestión de innovación, sino de equidad. Las editoriales, como motores de la difusión cultural y educativa, deben comprometerse a incluir en su estrategia la creación de libros accesibles que puedan ser disfrutados por todos. 

Este esfuerzo por parte de Grupo Editorial Literato es un recordatorio de que la tecnología, cuando se utiliza para promover la inclusión, puede transformar la vida de las personas y permitirles acceder al vasto mundo del conocimiento y la imaginación. Las editoriales tienen en sus manos la posibilidad de ser agentes de cambio en esta transformación.

Nos enorgullece anunciar que las primeras publicaciones ya codificadas con la tecnología Gridmark se encuentran ya en fase de muestra, una colección de libros infantiles que busca enseñar en los más pequeños el valor del dinero, la cual ha sido posible gracias a una coedición realizada con Unión Editorial. Esperamos presentar, tanto al público como a nuestros socios, en la próxima edición de la FIL Guadalajara 2024 estas colecciones y demás libros codificados que pueden ser una gran apuesta para los libros inclusivos.